jueves, 1 de enero de 2009



16


Pienso que en estos momentos

tal vez nadie en el universo piense en mí,

que sólo yo me pienso,

y si ahora muriese,

nadie, ni yo, me pensaría


Y aquí empieza el abísmo,

como cuando me duermo

Soy mi propio sostén y me lo quito.

Contribuyo a tapizar de ausencia todo.


Tal vez sea por esto

que pensar en un hombre

se paresca a salvarlo.


Roberto Juarroz ( Dorrego, Buenos Aires, 1925 )